La campaña de valorización del sector de Cooperativas de Jaén continúa con San Isidro, de Castillo de Locubín

Cooperativas Agro-alimentarias de Jaén continúa con su campaña de valorización del sector oleícola de la provincia y lo ha hecho presentando la cooperativa agrícola San Isidro, de Castillo de Locubín, la cual ha ampliado su mercado y comercializa ya envasado el 6% de su producción de aceite de oliva. Además, la almazara ha incrementado sus ventas de primera cosecha, lo que, en palabras de su presidente, Valeriano Castillo, forma parte de una estrategia para potenciar las ventas de producto de la máxima calidad. Fundada en 1954, la cooperativa San Isidro cuenta con 1.330 socios que han producido en la pasada campaña 18 millones de kilos de aceituna, traducidos en 3,6 millones de kilos de aceite de oliva, de los que una cantidad cada vez mayor se vende envasada. De ella, 30.000 kilos de cosecha temprana se comercializan con el nombre de Torre Vigía, un aceite de magníficas cualidades organolépticas. Este aceite ha sido presentado en el marco de la campaña de valorización del sector que desarrolla Cooperativas Agro-alimentarias de Jaén, cuyo presidente, Higinio Castellano, ha resaltado la calidad del producto, patente, ha añadido Castillo, en su aroma y en su sabor, derivados de la mezcla de variedades como picual, carrasqueño, picudo, cordobés, cornachuelo, negrillo y hojiblanca. Además, para la consecución de mejores aceites, la cooperativa San Isidro ha invertido en tecnología que redunda en la limpieza de la aceituna, según ha declarado su gerente, Antonio Cano, que ha resaltado la buena acogida del aceite de oliva temprano de la cooperativa en los mercados del centro y norte de España. En concreto, en Madrid, Castilla-León, País Vasco y Cataluña. Además de elogiar la calidad del aceite de la cooperativa San Isidro, y del que producen en conjunto las cooperativas de Jaén, Castellano ha pronosticado que, a tenor de la floración, la próxima campaña de será media-alta, si bien ha advertido de la posibilidad de que la falta de agua de lluvia y de riegos merme la cosecha de aceite.