PLAN DE FOMENTO DE LA PARTICIPACIÓN DE JÓVENES EN EL SECTOR COOPERATIVO AGROALIMENTARIO DE ARAGÓN
Cooperativas Agroalimentarias de Aragón está trabajando hace tiempo en la incorporación de jóvenes a los Consejos Rectores de las cooperativas socias.
Si el relevo generacional es un problema que afecta a nuestra agricultura y ganadería, la no representación de jóvenes en los CCRR supone en la práctica que su futuro lo están marcando quienes no lo van a vivir y eso es una contradicción.
Los CCRR deben de abrirse a jóvenes y los jóvenes deben comprometerse a colaborar y trabajar en ellos ya que, de otra forma, no será posible construir unas estructuras que den solución a los problemas que se van a encarar en el futuro.
La formación es un factor clave, no sólo para los jóvenes sino para los consejeros de cualquier cooperativa. Las nuevas disposiciones legales, el sentido empresarial y el sentido común incluso, requieren que aquellos que toman las decisiones que afectan a muchas personas, estén cada más capacitados para tomarlas y eso significa más formados y más seguros.
Jóvenes, mujeres y profesionales con larga experiencia, son partes de una misma maquinaria, pero realizan distintas funciones y tienen diferentes percepciones de la realidad. Si esas diferentes formas de ver la realidad no se incorporan a los órganos de decisión, la planificación no contará con todas las variables que son necesarias para realizar estrategias de futuro con posibilidades.
Las conclusiones que se recogieron en la planificación de la Jornada fueron:
- En primer lugar los Consejos Rectores actuales, que son conscientes del problema, no están haciendo actividades concretas para encararla, con notables excepciones, pero en general la tónica dominante es un diagnóstico que carga la responsabilidad fundamentalmente sobre los jóvenes pero que no propone acciones.
- Por otra parte, si bien es cierto que la generación actual es, por lo menos en apariencia, menos participativa que la anterior, tampoco tiene cauces abiertos y atractivos para ejercer una participación activa, como se les demanda.
- Los caminos que se proponen para el cambio de la situación son la formación y la promoción de la participación activa.
El primero a través de los programas de formación que ya están en marcha o de planes propios de las cooperativas financiadas por ellas mismas.
El segundo es que la participación que se ofrezca a los jóvenes sea concreta, cierta y que ataña a problemas reales, dicho de otra forma, que participen como miembros en los Consejos Rectores, no hay otra. Parte de lo que se les está ofreciendo es colaborar a través de consejos informales, sin capacidad de decisión real y con una función basada en sugerencias y eso no parece que esté teniendo mucho éxito.
Para pedir responsabilidad y compromiso hay que delegar y confiar en las personas en las que va a recaer una y otro.
Para pedir confianza, hay que trabajar demostrando que se está preparado y que se tiene capacidad de compromiso.
Esa es la tarea de unos y otros. Cooperativas Agroalimentarias estará donde sea necesario para apoyar a que este cambio se produzca de forma adecuada.
